Kobido es una técnica oriental ancestral, creada para mantener y recuperar la belleza del rostro de forma totalmente natural, además de los múltiples beneficios que aporta, ya que relaja el sistema nervioso, equilibra la energía y trabaja el balance de órganos y emociones.
Kobido es otra técnica que nos ofrece la rica tradición oriental. Se compone de una serie de fluctuaciones entre movimientos rápidos, lentos, profundos, amasamientos, percusiones, drenaje linfático japonés y al finalizar, aplicamos tratamiento de Shiatsu, trabajando meridianos según la necesidad de nuestro paciente.
Estas técnicas terapéuticas estimulan los nervios faciales alcanzando las células de la piel, benefician y aumentan la circulación sanguínea, distribuyendo nutrientes y eliminando toxinas e impurezas.
En este masaje se trabajan los 16 músculos faciales superficiales y específicamente puntos neurosensoriales y meridianos energéticos que van a influir de manera notable sobre la nutrición celular y la circulación de la energía, eliminando toxinas, mejorando la salud y atenuando las arrugas y la tensión del rostro.
Cuando los músculos están relajados, la sangre circula libremente por ellos recibiendo de esta manera todos sus beneficios, estimulando la producción de colágeno y elastina, responsables de la salud de la piel, por lo que Kobido es eficaz para que las células de la piel puedan repararse y rejuvenecerse por sí solas.
Efectos
- Efecto terapéutico: el Masaje Facial Japonés incrementa la temperatura de la piel facilitando la liberación de toxinas profundamente fijadas. Al aumentar la temperatura se activa el sistema linfático, lo que le permite transportar y eliminar más eficientemente las bacterias y las toxinas de las células de la piel.
- Efecto regulador: aumenta la capacidad de la piel para retener la hidratación, creando una barrera emoliente contra la evaporación.
- Efecto relajante: el Masaje Facial Japonés libera las contracturas del tejido muscular, permitiendo una buena irrigación sanguínea por toda la superficie del rostro. Esto aporta oxígeno y nutrientes hasta las células de la piel. Únicamente cuando la circulación sanguínea se ve mejorada, las células de la piel pueden repararse y rejuvenecerse por sí mismas.
- Efecto estético: Con este masaje, conseguimos redefinir totalmente el óvalo facial y así frenar el envejecimiento, mejorar la oxigenación y nutrición de las células de la piel, activar, iluminar, tonificar, mejorar el aspecto de las manchas y poco a poco, el lisaje y eliminación de arrugas.
- Tratamiento Shiatsu: si el terapeuta que realiza el masaje Kobido además aplica tratamiento con Shiatsu, podrá incidir en el equilibrio de órganos, circulación de Ki y sangre en todo el organismo, ampliando los beneficios terapéuticos del Kobido a un sinfín de posibilidades y según las necesidades de cada paciente.
Con resultados visibles desde la primera sesión, quién lo prueba repite! Nos garantiza como terapeutas resultados, fidelización y continuidad.
Algunos beneficios del kobido:
- Combate el estrés.
- Alivia las migrañas y los dolores de cabeza.
- Evita la rigidez facial.
- Mejora la circulación.
- Disminuye algunos problemas en el sistema digestivo como el estreñimiento.
- Reduce los efectos del bruxismo.
- Favorece la vista por el estímulo en las zonas cercanas a los ojos.
En mi experiencia personal, Kobido ha supuesto un gran desarrollo y expansión profesional, que además ayuda a introducir el Shiatsu Zen a mis clientes y a darlo a conocer en todo el mundo.
Te animo a que realices este curso profesional en Zenit Shiatsu para ampliar tu formación terapéutica con una técnica fabulosa, y que está totalmente comprobado que a las clientas, sobre todo mujeres, les encanta y repiten.
Melina Casadei
Terapeuta Zen Shiatsu y Formadora Kobido